Adiós al empresario que le dio el «alma» al restaurante Pueblito Viejo

 

En las últimas horas se conoce el deceso, en circunstancias, que investigan las autoridades del comerciente y empresario del sector de la gastronomía y el turismo, Hugo Muños Arévalo.

Según versiones preliminares, que están por establecerse plenamente, el fue hallado, en su establecimiento público, ubicado, en la vía a MantaPantano, por un trabajador que lo halló sin vida.

Esta persona, reveló que el estaba enfermos y con muchos problemas según su versión.

El hecho ha causado consternación y tristeza en medio de una generación de yopaleños, que compartieron en los establecimientos que administró a lo largo de su estadía en tierra casanareña.

Precisamente la periodista Rosalba Múnera, quien compartió con él y su esposa, en varias oportunidades en los restaurantes que administró, publicó en su portal Punto de Vista un recuerdo, de este apreciado ciudadano que se nos fue

Adiós al administrador de Pueblito Viejo

Hugo, había llegado a la capital casanareña, hacía más de treinta años y tomo el tradicional restaurante «Pueblito Viejo», ubicado inicialmente en el parque Ramón Nonato Pérez, del municipio y allí junto a su esposa la también apreciada, Sara ‘Sarita’ Niño, consolidó durante muchos años un verdadero punto de encuentro de celebración de eventos especiales, para las familias tradicionales del departamento, debido a la calidez de la atención,la calidad del servicio y el exquisito sabor de las comidas que ofrecía con dedicación está distinguida pareja de empresarios

Con el ánimo de dar un ambiente campestre «Pueblito Viejo» se reinauguró en la vía Matapantano y en ese lugar, Hugo, vivió y atendió su negocio hasta su último día.

Sin lugar a dudas Muñoz Arévalo, deja un vacío y gran recuerdo en todos aquellos que compartieron distintos momentos de su vida, destacándose por su caballerosidad, amabilidad, rectitud y don de gentes.

Desde Punto de VISTA enviamos un saludo solidario y de condolencias a Sara Niño a sus hijos, demás familiares y amigos de Hugo.

Silencio y Paz en su tumba